El 42% de los españoles dice no ser fiel a su banco y estar dispuesto, llegado el caso, a cambiar de entidad financiera, según pone de manifiesto el último informe global “Fidelidad del Consumidor”, realizado por la multinacional de estudios de mercado Nielsen tras consultar a 29.000 consumidores de 58 países durante el primer trimestre del año. Una investigación que confirma que España es el país del entorno europeo que menos reparos tiene a la hora de mudarse y elegir otra “marca bancaria”.
Lo cierto es que el 73% de los europeos se muestra leal a su banco y sólo cambiaría en el 52% de los casos si le ofrecieran un incentivo muy significativo. En ese sentido, España es la excepción, seguido de lejos por Portugal e Italia, donde el 36% y el 23%, respectivamente, de sus ciudadanos también se declaran infieles en este aspecto.
La investigación, que también analiza la fidelidad de los consumidores respecto a otros sectores, revela que mientras los ciudadanos europeos en general muestran sobre todo su lealtad a la banca y a sus proveedores de servicios móviles e Internet, en este orden, los españoles, por el contrario, manifiestan mucha más lealtad a su marca de refrescos de siempre (66%), a los medicamentos y productos sanitarios (70%), así como, por ejemplo, al supermercado o tienda habitual donde realiza la compra (a los proveedores de servicios de telefonía móvil solo lo son el 59%, dos puntos menos que a las marcas de teléfonos móviles).
En concreto, el estudio muestra que el 77% es completamente fiel o muy fiel a su supermercado, y que lo mismo ocurre con los productos relacionados con la salud o con aquellos de belleza y de cuidado personal, que despiertan un 70% y un 64% de lealtad, respectivamente, entre los consumidores. Algo menos fieles son los españoles a los proveedores de servicios de Internet y cable (solo el 57%), a las marcas de ordenadores (59%), a las marcas de electrónica para el hogar (56%), a la electrónica de consumo (55%), a las marcas de electrodomésticos (57%) y desde luego a las marcas de snacks (53%).
En cualquier caso, en el mercado español existe una sensibilidad al precio motivada por la crisis económica que se percibe y afecta a ámbitos muy diferentes en lo relativo a coste. Es la razón de que los españoles, por ejemplo, están dispuestos a cambiar de marca de snacks (47%), de electrónica (45%), de electrodomésticos (43%) e incluso también de bebidas alcohólicas (43%).
Por otra parte, el informe incide en cómo la fidelidad de los consumidores no es eterna y puede verse alterada por nuevas iniciativas de otras compañías o por una simple mejora en las condiciones de los programas de fidelización. En este sentido, más de la mitad de los consumidores cambiaría de marca, compañía o vendedor ante un mejor precio (61%), mientras que un 15% lo haría movido por la mejor calidad del producto o un mejor servicio (13%).
En cuanto a los programas de fidelización de las empresas, el análisis de Nielsen pone de manifiesto cómo los descuentos o los productos gratis son los incentivos preferidos por el 80% de los consumidores, seguidos de un mejor servicio al cliente (39%) y la gratuidad de los costes de envío (33%). Y entre las razones por las que un consumidor decidiría no adherirse a un programa de este tipo, la cuestión monetaria parece determinante, ya que un 57% de los encuestados no se registraría si fuera demasiado caro.
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